Comer. Encuentra docenas de comer con fotos para copiar y compartir.
A menudo me he tenido que comer mis palabras y he descubierto que eran una dieta equilibrada.
Mejor comer pan de mendigo con quienes amamos vivir, que llevar la culpa consigo y probar su sangre en rico festín.
A todo se acostumbra uno en esta vida, menos a no comer.
De hambre a nadie vi morir, de mucho comer, cien mil.
Dejé de comer y de beber para meditar; es inútil: más vale aprender.
El envidioso es de tal ser, que no se le indigesta lo que come, sino lo que ve comer.
Comer sin trabajar, no se debe tolerar.
Odio la realidad, pero es en el único sitio donde se puede comer un buen filete.
La vida es tan amarga que abre las ganas de comer.
La única manera de conservar la salud es comer lo que no quieres, beber lo que no te gusta, y hacer lo que preferirías no hacer.
Hay gente que come tierra y se come toda la gente que hay sobre ella como las langostas en la Biblia. Y otra gente que se para alrededor y los mira comer.
Oficio, bueno o malo, da de comer al amo.
A ninguno le da pena, comer cosita buena.
Me siento vagabunda de las letras. Quiero comer mi pan con el mendigo. Beber vino de todos. Tomar el sol tendida sobre la hierba húmeda.
Nadie debe comer sin habérselo ganado.
Comer con desgana convierte el alimento en repulsivo manjar.
Enséñame a comer en otras manos, a no escribir poemas con tu huella, a apagar toda luz que tú encendiste, a separar el ruido de tu nombre de las cosas soñadas, de las cosas queridas.
La monogamia es como estar obligado a comer papas fritas todos los días.
Antes, por cinco marcos, el mismo Freud te trataba. Por diez, te trataba y te planchaba los pantalones. Por quince marcos, Freud permitía que tú le tratarás a él y eso incluía una invitación a c...
Debemos buscar a alguien con quien comer y beber antes de buscar algo que comer y beber, pues comer solo es llevar la vida de un león o un lobo.
Los diplomáticos tienen garantizado por mucho tiempo su trabajo, porque no parece probable que los ordenadores a corto plazo aprendan a beber champange y a comer langosta.
El hombre nació en la barbarie, cuando matar a su semejante era una condición normal de la existencia. Se le otorgo una conciencia. Y ahora ha llegado el día en que la violencia hacia otro ser huma...
Para adelgazar no hay nada como comer caviar sin pan y beber champán sin burbujas.
El único hombre que es realmente libre es aquel que puede rechazar una invitación a comer sin dar una excusa.
El perro del hortelano, que no come las berzas ni las deja comer a su amo.
Vivimos para trabajar; trabajamos para comer; comemos para vivir.
El comer y el rascar, todo es empezar
Lo que no has de comer, déjalo cocer.
Corté la naranja en dos, y las dos partes no podían quedar iguales. ¿Para cuál fui injusto -yo, que las voy a comer a ambas?
¿Cómo comer sin ti, sin la piadosa costumbre de tus alas que refrescan el aire y renuevan la luz?
Hace falta una mentalidad de esclavo para comer en el plato empezado por otra persona.
Creer uno que sabe Historia porque la conoce en los compendios, es querer formarse idea de la grandeza del mar, al comer una ostra
Debemos pensar en esos andaluces rudos que llegaron a América en busca de oro y mujeres, porque en España su realidad era terrible, y se encuentran con un mundo duro y áspero, y con los aztecas, qu...
Hay que comer para vivir, y no vivir para comer
Es increíble lo que un hombre tiene que llegar a hacer solo para poder comer, dormir y vestirse.
Me siento orgulloso de ser estadounidense. Debido a que un norteamericano puede comer cualquier cosa sobre la faz de esta tierra, siempre y cuando él tenga dos pedazos de pan.
Maldito Pedro Jota. Me copiaste mi peinado, me plagiaste los tirantes, y ahora quieres imitarme en lo que me da de comer: meterme con Mariano Rajoy. ¡Pues no te lo voy a permitir!
Si me das pescado, comeré hoy; si me enseñas a pescar, podré comer mañana.
Los derechos socioeconómicos son inherentes a la dignidad humana, o si no, son pura retórica. El primer derecho humano no es el derecho a la vida en abstracto, sino el derecho a comer caliente cada ...
Necesitamos desesperadamente que nos cuenten historias. Tanto como el comer, porque nos ayudan a organizar la realidad e iluminan el caos de nuestras vidas.