Frases de despedida cuando alguien muere ( 3 )
Frases de despedida cuando alguien muere. Encuentra docenas de frases de despedida cuando alguien muere con fotos para copiar y compartir.
El amor nace del recuerdo, vive de la inteligencia y muere por olvido.
Cuando al hombre se le pone como medida de todas las cosas, se le convierte en esclavo de su propia finitud.
El amor no envejece nunca; muere en la infancia.
La moda muere joven.
El hombre nace sin dientes, sin cabello y sin iulsiones. Y muere lo mismo, sin dientes, sin cabellos y sin ilusiones.
Amar a alguien es decirle: tú no morirás jamás.
Conviene vivir considerando que se ha de morir; la muerte siempre es buena; parece mala a veces porque es malo a veces el que muere.
El que vive de esperanzas, muere de sentimiento.
Si la pena no muere, se la mata.
El que nace bonito... muere en lata.
Si alguien se vuelve para mirar tu traje, es que no vas bien vestido.
El mas tacaño de los hombres hace una excepción al tratarse de ayudar a alguien con palabras.
Qué triste es la despedida, cando aun existe amor
no puede cerrar la herida, se desangra el corazón
no se sabe a dónde ir, y se pierde la razón,
se acaban las ilusiones. Ya no hay a quien darle...
No hay beso que no sea principio de despedida; incluso el de llegada.
Lo más importante que aprendí a hacer después de los cuarenta años fue a decir no cuando es no.
Se gana y se pierde, se sube y se baja, se nace y se muere. Y si la historia es tan simple, ¿por qué te preocupas tanto?.
No pocas veces ya he dicho adiós; conozco las horas desgarradoras de la despedida.
¿Dices que no se siente la despedida?, ¡Ay!, di al que te lo dijo que se despida.
Cuando no te toca aunque te pongas, cuando te toca aunque te quites.
Cuando te inunde una enorme alegría, no prometas nada a nadie. Cuando te domine un gran enojo, no contestes ninguna carta.
El amor nace de nada y muere de todo.
La dicha de la vida consiste en tener siempre algo que hacer, alguien a quien amar y alguna cosa que esperar.
Ojos grises, cabeza gacha, pasos lentos, anuncio mi despedida...
Amarte fue tocar el cielo y ver lo hermoso de su espacio sin embargo con esta dura despedida no puedo ni tocarme el alma esta tan lastimada por tu partida q ni ve la hermosura que le ense~astes alguna...
Cuando el amor es algo real e incontrolable; nos entra un miedo indefinible e intolerable, por que así debe ser o así debemos ver; que no hay nada igual a el.
Cuando alguien me ha ofendido trato de elevar mi alma muy alto para que la ofensa no la alcance.
Si alguien ama a una flor de la que solo existe más que un ejemplar entre los millones y millones de estrellas, es bastante para que sea feliz cuando mira a las estrellas.
Cuando un hombre de letras alemán deseaba antiguamente dominar a su nación, le bastaba con hacerle creer que había alguien dispuesto a dominarla. Al punto quedaban todos tan intimidados que se deja...
Como los políticos nunca creen lo que dicen, se sorprenden cuando alguien sí lo cree.
La vida no ha sido sencilla, el sufrir nos enseña tanto a confiar o no en alguien, al final logras aprender cuando entregas todo sin condiciones y recibes solo desilusiones....
No es necesario demostrar el amor que sientes por alguien cuando el alma habla por ti, si no habla no hay amor solo miedo a la separabilidad.
Cuando alguien que de verdad necesita algo, lo encuentra, no es la casualidad quien lo procura, sino él mismo. Su propio deseo y su propia necesidad le conducen a ello.
Cuando odiamos a alguien, odiamos en su imagen algo que está dentro de nosotros.
El puente solo se repara cuando alguien se cae al agua.
La soledad es muy hermosa... cuando se tiene alguien a quien decírselo.
De mí se dirá posiblemente que soy un escritor cómico, a lo sumo. Y será cierto. No me interesa demasiado la definición que se haga de mí. No aspiro al nobel de literatura. Yo me doy por muy bie...
El placer de leer todo se duplica cuando uno vive con alguien que comparte los mismos libros.
Cuando se teme a alguien es porque a ese alguien le hemos concedido poder sobre nosotros.
Prefiero equivocarme creyendo en un dios que no existe, que equivocarme no creyendo en un dios que existe. Porque si después no hay nada, evidentemente nunca lo sabré, cuando me hunda en la nada ete...
A mí, cuando veo un muerto, la muerte me parece una partida. El cadáver me da la impresión de un traje abandonado. Alguien se fue y no necesitó llevar aquel traje único que había vestido.
