Frases de un hombre despechado ( 19 )
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Un hombre fecundante en el Espíritu busca engendrar sus virtudes en una mujer de alma bella, para asegurar la perpetuidad de la sabiduria.
La riqueza de un hombre no se encuentra en la cantidad de dinero que posee, sino en la calidad de su conocimiento y educación.
Todo hombre es, o confía llegar a ser un holgazán.
El trabajo cansa. Eso prueba que el hombre no está hecho para trabajar.
Es muy difícil decir si el hombre nace malo o si se vuelve así enseguida.
El hombre modesto suele ser admirado, si es que la gente llega a saber de él.
El hombre ha de fijar un final para la guerra. Si no, la guerra fijará un final para el hombre.
No hay vicio que venza la voluntad de un Hombre.
Sí, lo soy. Un cobarde es un hombre capaz de prever el futuro. un valiente es casi siempre un hombre sin imaginación
Pues claro que todo hombre tiene un destino. Desgraciadamente, ninguno sabe cuál es...
El hombre de bien y de valor debe ser indiferente a los choques de la mala suerte.
El hombre es un Dios cuando sueña y solo un mendigo cuando piensa
La mayor declaracion de amor
es la q no se hace
el hombre q siente mucho
habla poco.
Nuestras virtudes y nuestros defectos son inseparables, como la fuerza y la materia. Cuando se separan, el hombre no existe.
Un Maricon no es ese que ama a otro hombre, sino ese idiota que se cree muy macho golpeando a una Mujer.
Que BAJO es que un hombre exponga los trapos sucios públicamente de su "mujer" o "ex" eso HABLA de su Hombria
El hombre de una sola mujer , es aquel que realmente entiende sobre las mujeres.
Grande o pequeño, todo hombre es poeta si sabe ver el ideal, más allá de sus actos.
No hay ninguna satisfacción en ahorcar a un hombre que no se oponga a ello.
Ninguno nace libre de vicios; y el hombre más perfecto es aquel que solo tiene los pequeños.
Un hombre aislado se siente débil, y lo es.
Las mujeres no son más que órganos genitales articulados y dotados de la facultad de gastar todo el dinero del hombre.
Una de las principales enfermedades del hombre es su inquieta curiosidad por conocer lo que no puede llegar a saber.
Nunca he odiado a un hombre tanto como para devolverle sus diamantes.
A fuerza de hablar de amor, uno llega a enamorarse. Nada tan fácil. Esta es la pasión más natural del hombre.
Todo lo que una mujer quiere de verdad - un perro, un hombre, Dios, cualquier cosa - lo quiere como a un hijo.
Un hombre inteligente es aquel que sabe ser tan inteligente como para contratar gente más inteligente que él.
El hombre silencioso no presta testimonio contra sí mismo.
Un pintor es un hombre que pinta lo que vende. Un artista, en cambio, es un hombre que vende lo que pinta.
No existe para el hombre más que una verdadera desdicha: incurrir en falta y tener motivo de censura contra sí.
Ninguna época ha sabido tantas y tan diversas cosas del hombre como la nuestra. Pero en verdad, nunca se ha sabido menos qué es el hombre.
El hombre puede trepar hasta las cumbres más altas, pero no puede vivir allí mucho tiempo.
El hombre puede creer en lo imposible, pero no creerá nunca en lo improbable.
No tarda nueve meses sino sesenta años en formarse un hombre.
Cualquiera puede hacer historia; pero solo un gran hombre puede escribirla.
El hombre es el único que envejece; todo lo demás rejuvenece en torno suyo cada día.
El hombre corriente, cuando emprende una cosa, la echa a perder por tener prisa en terminarla.
Un sentimental es un hombre que ve un absurdo valor en todo, y no conoce el precio fijo de nada.
Un hombre vulgar puede acabarse lo mismo que un gran hombre.
La altivez es útil, todo hombre debe ser altivo.
