La mitad de nuestras equivocaciones. Encuentra docenas de la mitad de nuestras equivocaciones con fotos para copiar y compartir.
La mitad de nuestras equivocaciones nacen de que cuando debemos pensar, sentimos, y cuando debemos sentir, pensamos.
Experiencia es el nombre que damos a nuestras equivocaciones.
...de la fortuna depende la mitad de nuestras acciones, pero nos deja dirigir la otra mitad o algo menos...
Si la inspiración no viene a mí salgo a su encuentro, a la mitad del camino.
El hombre que no ha amado apasionadamente ignora la mitad más bella de la vida.
Daría todo lo que sé, por la mitad de lo que ignoro.
El principio es la mitad del todo.
El misterio es la mitad de la belleza.
Vivimos de nuestros deseos más que de nuestras obras.
Hay que emplear mucha prudencia al formarnos nuestras opiniones y más todavía al cambiarlos.
Si pudiéramos vender nuestras experiencias en lo que nos cuestan, todos seríamos millonarios.
La amistad duplica las alegrías y divide las angustias por la mitad.
Cuentame como va cayendo el sol, mientras hablas pensaré: qué guapa estas! que suerte ser la mitad del cuento de un atardecer que observo al escucharte porque mis ojos son tu voz.
Si pudieramos conocer el resultado de nuestras acciones antes de realizarlas, no existiría el arrepentimiento.
Un simple desahogo.
solo con un simple desahogo puedo hacer muchas cosas...
decir por ejemplo que todo lo que hago para ti puede ser estupido...
y como podemos culpar de no enamorarnos a un cupid...
"" Recuerda que, no debemos humillar a nadie. Los errores que hoy cometen los demás, pueden ser nuestras equivocaciones de mañana ""
Noventa y nueve por ciento de nuestras vidas son silencios, el otro uno por ciento restante tan solo equivocaciones.
Creo que si tuviéramos la mitad de nuestras empresas y de la mitad de nuestros países dirigidas por mujeres, y la mitad de nuestros hogares dirigidos por hombres, las cosas serían mejor. Sabemos qu...
Comer y la comida son una parte maravillosa de la experiencia de nuestra vida, y la mitad de nosotros está caminando alrededor temiendo tener que averiguar qué poner en nuestras bocas.
La guerra de Irak fue librada por la mitad de uno por ciento de nosotros. Y a menos que formaban parte de ese pequeño grupo o tenía un familiar que era, nos fuimos sobre nuestras vidas como más usu...
La cantidad de la deuda de EE.UU. en manos de países como China y Japón se encuentra en un máximo histórico, con los inversores extranjeros la celebración de la mitad de la deuda pública con los...
Al igual que el Consejo de Seguridad era irrelevante para la gran lucha de la última mitad del siglo XX - la libertad contra el comunismo - también lo es en gran medida al margen de nuestras luchas ...
Estamos viviendo en el año 1937, y nuestras universidades, creo yo, no estamos a mitad de camino del siglo XV. Hemos hecho casi ningún cambio en nuestra concepción de la organización universitaria...
Hay que demostrar nuestras equivocaciones lo más rápido posible, es la única manera de avanzar.
Damien, ahí radica la posesión; no tanto en las guerras, como algunos quieren creer; y muy pocas veces en intervenciones extraordinarias como ésta... la de esta niña... esta pobre criatura. No, yo...
Desde la mitad de la vida hacia adelante, solo permanece vital aquel que está preparado para morir con vida.
La palabra es mitad de quien la pronuncia, mitad de quien la escucha.
Un hombre de estado es el que pasa la mitad de su vida haciendo leyes, y la otra mitad ayudando a sus amigos a no cumplirlas.
No conozco a la mitad de ustedes, ni a la mitad de lo que querría, y lo que yo querría es menos de la mitad de lo que la mitad de ustedes merece.
La noche es la mitad de la vida y la mejor mitad.
Todos los que parecen estúpidos, lo son y, además también lo son la mitad de los que no lo parecen.
La sociedad no puede en justicia prohibir el ejercicio honrado de sus facultades a la mitad del género humano.
El toreo es un arte misterioso, mitad vicio y mitad ballet. Es un mundo abigarrado, caricaturesco, vivísimo y entrañable el que vivimos los que, un día soñamos con ser toreros.
La mayoría de los hombres emplean la mitad de su vida en hacer miserable la otra.
Hay que perder la mitad del tiempo, para poder emplear la otra mitad.
Los hombres son criaturas muy raras: la mitad censura lo que practica; la otra mitad practica lo que censura; el resto siempre dice y hace lo que debe.
Los médicos pueden enterrar sus equivocaciones, pero un arquitecto solo puede aconsejar a su cliente plantar yerba.
¿Qué hace falta para ser feliz? Un poco de cielo azul encima de nuestras cabezas, un vientecillo tibio, la paz del espíritu.
El hombre que quiere, ha hecho ya la mitad del camino.
No debemos tomar la terquedad de nuestros prejuicios como valor para defender nuestras opiniones.