Frases para pocos hombres. Encuentra docenas de frases para pocos hombres con fotos para copiar y compartir.
Se encuentran muchos hombres que hablan de libertad, pero muy pocos cuya vida no se haya consagrado, principalmente, a forjar cadenas.
No hay más goces reales en el mundo que el amor fiel de la casa, y la amistad en los pocos hombres buenos.
La educación consiste en enseñar a los hombres no lo que deben pensar sino a pensar.
Pocos son entre los hombres los que llegan a la otra orilla; la mayor parte corre de arriba a abajo en estas playas.
La fama y el poder son los objetos de todos los hombres. Incluso su fruto parcial se ganó por muy pocos, y que, también, a expensas de la social, el placer, la salud, la conciencia, la vida.
Pocos hombres tienen la virtud de soportar mejor postor.
Hay pero muy pocos hombres lo suficientemente inteligente como para saber todo el daño que hacen.
En general, los hombres juzgan más por los ojos que por la inteligencia, pues todos pueden ver, pero pocos comprenden lo que ven.
Los hombres capaces de alzar y llevar adelante una bandera son muy pocos.
Muchos hombres han sido capaces de hacer una cosa sabia, más una cosa astuta, pero muy pocos algo generoso.
Hay tres clases de hombres. El que aprende por lectura. Los pocos que aprender por la observación. El resto de ellos tienen que orinar en la cerca eléctrica para sí mismos.
El anarquismo se basa en la observación de que, dado que pocos hombres son lo suficientemente sabios como para gobernarse a sí mismos, menos aún son lo suficientemente sabio para gobernar a otros.
La pantalla de la pena hace más exigencias que el propio dolor. ¡Cuán pocos hombres están tristes en su propia empresa.
...; en la guerra, para vengar la afrenta de unos pocos y a veces de uno solo, afligimos cruelmente a tantos miles de hombres que no se lo merecen.
Lo que distingue a la mayoría de los hombres de los pocos es su capacidad para actuar de acuerdo a sus creencias.
Algunos hombres no se sienten pequeños, pero estos son los pocos hombres que son.
Es en el carácter de muy pocos hombres para honrar sin envidia un amigo que ha prosperado.
Pocos hombres son llamados para gobernar ciudades o imperios; pero cada cual está obligado a gobernar sabia y prudentemente su família y su casa.
¿Quién podrá quejarse de que tiene pocos oyentes si el Creador del género humano se conformó con doce hombres?
La muerte es un sacramento del que solo son dignos los más puros: muchos hombres se deshacen, pocos mueren
Para llevar una vida feliz es esencial una cierta capacidad de tolerancia al aburrimiento. La vida de los grandes hombres solo ha sido emocionante durante unos pocos minutos trascendentales. Una gener...
A veces conviene ir hacia el mundo y frecuentar los hombres pues uno se siente allí obligado y llamado, pero el que prefiere permanecer solo y tranquilamente en la obra y solo quisiera tener muy poco...
Es infinitamente mejor tener unos pocos hombres buenos que muchos indiferentes.
En la vida, encontraremos muchos hombres que son grandes, y algunos que son buenos, pero muy pocos hombres que son grandes y bien.
¡Pero la guerra se hace para satisfacer la ambición de las personas; por afán de ganancia material para unos pocos, causando una terrible miseria a innumerables hogares, destrozando los corazones d...
Hay pocos bípedos, después de Adán, que hayan merecido el apelativo de hombres
Una verdad, una fe, una generación de hombres pasa, se la olvida, ya no cuenta. Excepto para aquellos pocos, tal vez, que creyeron esa verdad, profesaron esa fe o amaron a esos hombres. Joseph Conrad...
Pocos hombres tienen la fuerza de carácter suficiente para alegrase del éxito de un amigo sin sentir cierta envidia.
Lo único que hace falta para que los hombres descubran el amor es tener demasiado cerca a una mujer; y lo único que hace falta para que este amor se disipe es seguir teniéndola demasiado cerca.
Debemos obrar como hombres de pensamiento; debemos pensar como hombres de acción.
Aquel que se confía a dios deja de temer a los hombres.
Las mujeres con pasado y los hombres con futuro son las personas más interesantes.
Las personas más insoportables son los hombres que se creen geniales y las mujeres que se creen irresistibles.
Deben buscarse los amigos como los buenos libros. No está la felicidad en que sean muchos ni muy curiosos; sino pocos, buenos y bien conocidos.
En todo momento de mi vida hay una mujer que me lleva de la mano en las tinieblas de una realidad que las mujeres conocen mejor que los hombres y en las cuales se orientan mejor con menos luces.
El orgullo de los mediocres consiste en hablar siempre de sí mismos; el orgullo de los grandes hombres es de no hablar nunca de ellos.
Los defectos y faltas de los hombres dan a conocer su verdadera valía. Si examinamos con atención las faltas de un hombre, llegaremos a conocer si su bondad es sincera o fingida.
Cada criatura, al nacer, nos trae el mensaje de que dios todavía no ha perdido la esperanza en los hombres.
La fidelidad de muchos hombres se basa en la pereza, la fidelidad de muchas mujeres en la costumbre.
Solo hay dos palancas que muevan a los hombres: el miedo y el interés.