Frases para personas que ya no están con nosotros ( 23 )
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Las personas fuertes crean sus acontecimientos; las débiles sufren lo que les impone el destino.

Nuestro ridÃculo defecto nacional es no tener mayor enemigo de nuestro éxito y de nuestra gloria que nosotros mismos.

La vanidad es tan fantástica, que hasta nos induce a preocuparnos de lo que pensarán de nosotros una vez muertos y enterrados.

Hay personas a las que la fortuna no les procura más que miedo de perderla.

Parece que la injusticia tiene en nosotros más abrigo que la justicia. Pero yo me rÃo, y sigo mi camino.

Existe en todos nosotros un fondo de humanidad mucho menos variable de lo que se cree.

Estimo mucho a las personas que conozco. De aquà que no trate de conocer a nadie.

Nuestro destino ejerce su influencia sobre nosotros incluso cuanto todavÃa no hemos aprendido su naturaleza; nuestro futuro dicta las leyes de nuestra actualidad.

Por cada persona que quiere enseñar, hay, aproximadamente, treinta personas que no quieren aprender.

Cuidamos más que se hable de nosotros que de como se hable.

En el fondo de nosotros mismos siempre tenemos la misma edad.

La envidia es causada por ver a otro gozar de lo que deseamos; los celos, por ver a otro poseer lo que quisiéramos poseer nosotros.

Vosotros, los europeos, tenéis los relojes, pero nosotros tenemos el tiempo.

Cuando las cosas no quieren conformarse con nosotros, nosotros debemos conformarnos con ellas.

Hablamos de matar el tiempo como si no fuera el tiempo el que nos mata a nosotros.

No hay dos personas que lean el mismo libro.

Con las personas que no puedes amar, muéstrate siempre amablemente evasivo.

Todos somos fragmentos no solo del hombre en general, sino de nosotros mismos.

Nunca llegamos a hacernos a la idea de que contamos menos para los demás de lo que ellos cuentan para nosotros.

Acusar a la maldad de los tiempos es excusarnos a nosotros mismos.

Existen en nosotros varias memorias. El cuerpo y el espÃritu tienen cada uno la suya.

Las cosas no cambian; cambiamos nosotros.

Cosa dulce es un amigo verdadero; bucea en el fondo de nuestro corazón inquiriendo nuestras necesidades. No ahorra el tener que descubrirlas por nosotros mismos.

Estoy convencido de que en un principio Dios hizo un mundo distinto para cada hombre, y que es en ese mundo, que está dentro de nosotros mismos, donde deberÃamos intentar vivir.

La señal de que no amamos a alguien es que no le damos todo lo mejor que hay en nosotros.

Nuestra lealtad es para las especies y el planeta. Nuestra obligación de sobrevivir no es solo para nosotros mismos sino también para ese cosmos, antiguo y vasto, del cual derivamos.

No recibimos una vida corta, sino que nosotros la acortamos. No somos de ella indigentes, sino manirrotos.

Establecemos reglas para los demás y excepciones para nosotros.

Hay quien pone en duda el porvenir del ideal de la libertad. Nosotros respondemos que tiene más que un porvenir: posee eternidad.

Casi todas las personas viven la vida en una silenciosa desesperación.

¿Cuál es el mejor gobierno? El que nos enseña a gobernarnos a nosotros mismos.

no ieras a las personas que mas quieres

Muchas personas no creen en la existencia de las criaturas celestiales llamadas ángeles, pero yo tengo la dicha de compartir mi vida con una angelita llamada…

Hemos modificado tan radicalmente nuestro entorno que ahora debemos modificarnos a nosotros mismos para poder existir dentro de él.
Dios, que muestras nuestras lágrimas a nuestro conocimiento, y que, en su inmutable serenidad, nos parece que no nos tiene en cuenta, ha puesto él mismo en nosotros esta facultad de sufrir para ense...

Hay personas que no saben perder su tiempo completamente solas. Son el azote de las personas ocupadas.

El mundo es un rompecabezas cuyas piezas cada uno de nosotros arma de diferente manera.

El dolor tiene un gran poder educativo; nos hace mejores, más misericordiosos, nos vuelve hacia nosotros mismos y nos persuade de que esta vida no es un juego, sino un deber.

El secreto de poner en ridÃculo a las personas reside en conceder talento a aquellos que no lo tienen.

Tus pesadillas se hacen realidad, porque son los sueños de otras personas.