Frases-para-un-padre-fallecido ( 103 )
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Cita siempre errores propios antes de referirte a los ajenos. Así nunca parecerá que presumas.
Hay personas divertidas que no interesan y personas interesantes que no divierten.
El pueblo no es verdaderamente libre mientras que la libertad no esté arraigada en sus costumbres e identificada con ellas.
El aburrimiento no puede existir donde quiera que haya una reunión de buenos.
El tiempo es un gran maestro que arregla muchas cosas.
Lo malo de la pintura abstracta es que hay que molestarse en leer el título de los cuadros.
La conciencia es el mejor libro moral que tenemos.
La letra con sangre entra.
La moda es la manada; lo interesante es hacer lo que a uno le de la gana.
A la gloria de los más famosos se adscribe siempre algo de la miopía de los admiradores.
El aburrimiento es la explicación principal de por qué la historia está tan llena de atrocidad.
El sufrir merece respeto, el someterse es despreciable.
El camino de la civilización está pavimentado con envases de hojalata.
El arte es el hombre agregado a la naturaleza.
Los celos son una mezcla explosiva de amor, odio, avaricia y orgullo.
La suerte es una flecha lanzada que hace blanco en quien menos lo espera.
El presente no existe, es un punto entre la ilusión y la añoranza.
La guerra es de por vida en los hombres, porque es guerra la vida, y vivir y militar es una misma cosa.
En primer lugar acabemos con sócrates, porque ya estoy harto de este invento de que no saber nada es un signo de sabiduría.
¡arriba, haragán!¡no desperdicies la vida!ya dormirás bastante en la sepultura.
La imaginación es generosa y desprendida; la inteligencia calcula y se aferra a lo que sea.
Inteligencia militar: son dos términos contradictorios.
Ceder a un vicio cuesta más que mantener una familia.
No hay educación si no hay verdad que transmitir, si todo es más o menos verdad, si cada cual tiene su verdad igualmente respetable y no se puede decidir racionalmente entre tanta diversidad.
Nadie es más solitario que aquél que nunca ha recibido una carta.
El malvado descansa algunas veces; el necio jamás.
He sido un ser egoísta toda mi vida, no en teoría, pero sí en la práctica.
El dolor es más fuerte entre los más fuertes. Como el cáncer.
Un buen vino es como una buena película: dura un instante y te deja en la boca un sabor a gloria; es nuevo en cada sorbo y , como ocurre con las películas, nace y renace en cada saboreador.
Reza, pero no dejes de remar hacia la orilla.
La contemplación es un lujo, mientras que la acción es una necesidad.
Manos blancas no ofenden.
Mil cosas avanzan. Novecientas noventa y nueve retroceden. Esto es el progreso.
Es absurdo dividir a la gente en buena y mala. La gente es tan solo encantadora o aburrida.
En la adversa fortuna suele descubrirse al genio, en la prosperidad se oculta.
Gracias a la guerra uno no solo puede morir por sus ideales, sino que incluso puede morir por los ideales de otro.
El arte es la perfección de la naturaleza. La naturaleza hizo un mundo y el arte otro.
Los celos son la icteria del alma.
Vigilando, laborando y meditando, todas las cosas prosperan.
Todas las teorías son legítimas y ninguna tiene importancia. Lo que importa es lo que se hace con ellas.
