Frases tristes pero ciertas ( 9 )
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He sido un ser egoÃsta toda mi vida, no en teorÃa, pero sà en la práctica.

Reza, pero no dejes de remar hacia la orilla.

El olmo tiene bellas ramas, pero no da fruto.

El fanfarrón mata a un león ausente, pero se asusta de un ratón presente.

Todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar,pasar haciendo caminos, caminos sobre la mar.

Te puedes casar o quedarte soltero, pero te arrepentirás de las dos cosas.

La novedad atrae la atención y aún el respeto, pero la costumbre lo hace desaparecer pronto.

No tengas miedo a la verdad: puede doler mucho, pero es un dolor sano.

Se puede vivir sin un hermano, pero no sin un amigo.

Los hombres son crueles, pero el hombre es bueno.

Te llamas Rosa y yo Esperanza, pero tu nombre olvidarás, porque seremos una danza en la colina y nada más...

Afortunosamente, no respetamos la geometrÃa. Somos iguales, pero no somos semejantes.

¿puede alguien recordar el amor?. Es como querer conjurar el aroma de las rosas en un sótano. PodrÃas ver la rosa, pero el perfume, jamás. Y esa es la verdad de las cosas, su perfume.

La fortuna es un cristal, brilla, pero es frágil.

Uno siente que ciertas palabras son terribles para todos los demás, salvo para nosotros mismos.

Cuando estoy trabajando en un problema, nunca pienso sobre su belleza. Solo pienso en como resolver el problema. Pero cuando lo termino, si la solución no es bella, se que esta equivocada.

Estar preparado es importante,saber esperar lo es aún más,pero aprovechar el momento adecuado es la clave de la vida.

La copa está, solo apenas por la mitad pero tú, que felicidad... No la ves vacÃa, vuelve a mirar, imagina y vuelve a pensar que te puedes emborrachar, pero de alegrÃa.

Para el hombre, como para el pájaro, el mundo ofrece muchos sitios donde posarse, pero nidos solamente uno: su hogar.
Dos personas se acercan hacia nosotros por la carretera, y.sus siluetas se recortan fantásticamente contra el horizonte. Pero si aplaudiéramos, no lo entenderÃan, porque no saben nada de su relaciÃ...

Bien puede pesarle a todos los demonios, pero en mà no tendrán jamás cabida.

Se podrá hacer economÃa en cualquier circunstancia, pero a los enfermos provéaseles de cuanto les sea necesario.

A veces tu alegrÃa causa tu sonrisa, pero también hay veces en las que tu sonrisa puede causarte alegrÃa.

No me creas demasiado optimista; conozco a mi paÃs, y a muchos otros que lo rodean. Pero hay signos, hay signos.

Creo que nos habitamos unos a otros, pero no habitados. Porque no podrÃamos habitarnos unos a otros, habitados.

Un médico puede enterrar sus errores pero un arquitecto apenas puede aconsejar a sus clientes que planten enredaderas.

Puede haber amor sin celos, pero no sin temores.

La filosofÃa triunfa fácilmente de los males pasados y de los males por venir,pero los males presentes triunfan sobre ella.

Perdona a todos tus enemigos, pero no olvides sus nombres.

. . . Por ley de historia, un perdón puede ser un error, pero una venganza es siempre una infelicidad. La conciliación es la ventura de los pueblos.

Los demás no te dejarán vivir como deseas, pero si eres lo suficientemente ágil y fuerte, al menos no deberás vivir como ellos desean.
La ciencia son hechos; de la misma manera que las casas están hechas de piedras, la ciencia está hecha de hechos; pero un montón de piedras no es una casa y una colección de hechos no es necesaria...

Media humanidad se rÃe de la otra media, pero unos tienen gracia y los otros no.

Solemos perdonar a los que nos aburren, pero no perdonamos a los que aburrimos.

Hay dolores que matan: pero los hay más crueles, los que nos dejan la vida sin permitirnos jamás gozar de ellas.

Las revoluciones no se hacen por menudencias, pero nacen por menudencias.

Le expliqué que el mundo es una sinfonÃa, pero que dios toca de oÃdo.

Es muy cierto que gran parte de los hombres que son incapaces de amar tampoco valen mucho para la amistad. Pero también se ve menudo lo contrario.
Todo lo que quiero es que me caven un hoyo y que mi tumba diga: aquà cayó un loco del ajedrez. No jugaba bien, pero le gustaba jugar. Nunca pudo enfrentarse a un campeón. Murió como vivió: espera...

Los parientes nos los da el azar, pero elegimos a los amigos.