Frases para alguien que echas de menos ( 14 )
Frases para alguien que echas de menos. Encuentra docenas de frases para alguien que echas de menos con fotos para copiar y compartir.
Es la ignorancia de alguien que sabe cosas, pero que voluntariamente ignora hasta cierto punto su saber para dar lugar a lo nuevo que va a ocurrir.
Cuanto mayor es la fortuna, es menos segura.
Sabiendo sufrir se sufre menos.
Cuanto más posee el hombre, menos se posee a sí mismo.
"No me caigo bien a mí mismo", dijo alguien para explicar su propensión a la sociedad. "El estómago de la sociedad es más sólido que el mío, me aguanta".
A fin de cuentas, un héroe es alguien que quisiera discutir con los dioses, y así debilita a los demonios para combatir su visión.
Normalmente, cuando te encuentras con una persona que parece insignificante y que no llama la atención se dice: detrás de esa fachada, hay más de lo que parece. En mi caso sucede lo contrario: detr...
Uno siempre necesita de alguien. No hay nada peor que sentirse despreciado o ignorado. La vida en pareja. . . Es algo indispensable para vivir.
Piensa mucho, habla poco, escribe menos.
La miré fugazmente. Todos los días sueño que por fin voy a encontrar a alguien. ¡Si supiera usted cuantas veces he estado enamorado de esa manera!.
¿Conoce alguien el amor? ¡El amor es un sueño sin fin!.
Bajo un gobierno que encarcele a alguien injustamente, el sitio adecuado para una persona justa es también la cárcel.
Cuanto mayor es la prosperidad, tanto menos se debe confiar de ella.
Que dos y dos sean necesariamente cuatro, es una opinión que muchos compartimos. Pero si alguien sinceramente piensa otra cosa, que lo diga. Aquí no nos asombramos de nada.
Las pirámides son el mejor ejemplo de que, en cualquier tiempo y lugar, los obreros tienden a trabajar menos.
Cuando alguien dice estar de acuerdo, en principio, en hacer algo, quiere decir que no tiene la menor intención de hacerlo.
Hay millones de artistas que crean; solo unos cuantos miles son aceptados o, siquiera, discutidos por el espectador; y de ellos, muchos menos todavía llegan a ser consagrados por la posteridad.
Bien sé que las mujeres aman, por lo regular, a quienes lo merecen menos. Es que las mujeres prefieren hacer limosnas a dar premios.
Si los hombres emplean su libertad de tal manera que renuncian a ésta, ¿puede considerárseles por ello menos esclavos? Si el pueblo elige por un plebiscito a un déspota para gobernarlo, ¿sigue si...
Cuanto menos aporta un político, más ama a la bandera.
Por grandes y profundos que sean los conocimientos de un hombre, el día menos pensado encuentra en el libro que menos valga a sus ojos, alguna frase que le enseña algo que ignora.
Come poco y cena menos, que la salud de todo el cuerpo se fragua en la oficina del estómago.
No menos que el saber me place el dudar.
La libertad puede conducir a muchas transgresiones, pero incluso a los vicios les presta una forma menos innoble.
En un bosque se bifurcaron dos caminos, y yo... Yo tomé el menos transitado.
Esto marcó toda la diferencia.
A solas soy alguien. En la calle nadie.
Para trabajar basta estar convencido de una cosa: que trabajar es menos aburrido que divertirse.
El glotón es el sujeto menos estimable de la gastronomía, porque ignora su principio elemental: ¡El arte sublime de masticar!
Es preferible ser viejo menos tiempo que serlo antes de la vejez.
Es un gran error creerse más de lo que uno es, o menos de lo que uno vale.
Los placeres son como los alimentos: los más simples son aquellos que menos cansan.
En este mundo, cuando alguien tiene algo que decir, la dificultad no está en conseguir que lo diga, sino que lo repita a menudo.
Un gran hombre demuestra su grandeza por el modo en que trata a los que son o tienen menos que él.
El hombre es un animal no social, sino cordial, y la família es la forma menos imperfecta de la cordialidad humana.
Donde hay una empresa de éxito, alguien tomó alguna vez una decisión valiente.
Los más desgraciados son los que lloran menos.
¿Qué cosa más grande que tener a alguien con quien te atrevas a hablar como contigo mismo?
No te preguntes si vale la pena luchar por alguien, pregúntate: Si no lo hubiese hecho, podría perdonarme.
Veladamente...
Veladamente,
descorriendo pestillos,
ha llegado hasta mi cuarto
una pantera translúcida con la piel de diamante
que me morderá la nuca cuando menos lo espere.
Es el deseo.
Conozco a alguien que tiene más espíritu que Napoleón, que Voltaire, que todos los ministros presentes y futuros: la opinión pública.
