Frases para ser humilde
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Uno debe ser tan humilde como el polvo para poder descubrir la verdad.
No seas jamás humilde con los soberbios, ni soberbio con los humildes.
En lo tocante a la ciencia, la autoridad de un millar no es superior al humilde razonamiento de una sola persona.
Dios se deja conquistar por el humilde e rechaza la arrogancia del orgulloso.
Dios tiene dos tronos. Uno en lo más alto de los cielos y otro en el más humilde de los corazones.
La ciencia es orgullosa por lo mucho que ha aprendido; la sabiduría es humilde porque no sabe más.
Siempre habrá nieve altanera que vista el monte de armiño y agua humilde que trabaje en la presa del molino.
Cante mejor, dichoso, nocturno ruiseñor, yo, grillo humilde, digo: esta es mi voz.
Por humilde se tiene ya el que con lo necesario se contenta.
El humilde conocimiento de ti mismo es un camino más seguro hacia dios que el camino de la ciencia.
¿Qué debemos tratar de reencontrar en la historia? Al hombre, y al hombre más humilde.
En cuestiones de ciencia, la autoridad de mil no vale lo que el humilde razonamiento de un solo individuo.
Para ser humilde se necesita grandeza.
Préciate más de ser humilde virtuoso que pecador soberbio.
No seas tan humilde, no eres tan grande.
Debes ser fuerte sin ser rud@, ser amable sin ser débil, aprender con orgullo sin arrogancia, altanería y soberbia, ser gentil, sin ser suave, ser humilde sin ser tímid@.
Estoy satisfecho con el misterio de la eternidad de la vida y con el conocimiento, el sentido, de la maravillosa estructura de la existencia. Con el humilde intento de comprender aunque más no sea un...
Tomen sobre sí mi yugo y aprendan de mí, porque soy de genio apacible y humilde de corazón, y hallarán refrigerio para sus almas. Porque mi yugo es suave y mi carga es ligera
El más humilde libertino ha soñado con sultanas, y todo notario lleva en su intimidad las ruinas de un poeta
Es difícil ser humilde, cuando uno es tan grande como yo.
En casa soy un buen tipo: pero no quiero que el mundo lo sepa. La gente humilde he visto que no llegará muy lejos.
El hombre poderoso en el poder sucumbre; el hombre del dinero, en el dinero; el servil y humilde, en el servicio; el que busca el placer, en los placeres.
La revolución no es hecha para el pueblo por el liderazgo ni por el liderazgo para el pueblo sino por ambos, en una solidaridad inquebrantable. Esta solidaridad solo nace del testimonio que el lidera...
Jamás persona alguna de humilde estado ha ganado gran poder solo por medio de la fuerza, pero sí solo con la astucia
El Amor es la fuerza más humilde, pero la más poderosa de que dispone el ser humano.
Déjeme mostrarle el trabajo del humilde. Escuche.
El más grande y el mejor es el que se atribuye menos y es más humilde y ardiente para agradecer
Si tuviera un 80% de acierto en tiros libres seguramente sería un arrogante y no alguien humilde. Así que todo tiene su razón de ser.
Yo experimento un profundo y humilde deseo, y lo conservaré mientras viva, de aumentar la cantidad de alegría inofensiva
En la tierra nada se presta tanto para alegrar al melancólico, para entristecer al alegre, para infundir coraje a los que desesperan, para enorgullecer al humilde y debilitar la envidia y el odio, co...
Dos personas pueden hablar y una oír, pero tres individuos no pueden entablar conversación, por más humilde que sea.
El que ama, se hace humilde. Aquellos que aman, por decirlo de alguna manera, renuncian a una parte de su narcisismo.
No hay casa, por humilde que sea, en la que, si son puros los corazones que allí habiten, no entre el amor
El alma que está enamorada de Dios es un alma gentil, humilde y paciente
El orgullo quiere hacer más, el humilde quiere obedecer más.
Mi amor es a la vez humilde y audaz.
Si eres sensato, humilde, habrás observado que nunca se acaba de aprender... Sucede lo mismo en la vida; aun los más doctos tienen algo que aprender, hasta el fin de su vida; si no, dejan de ser doc...
Quiero decirles la verdad de una humilde mujer del pueblo ¡La primera mujer del pueblo que no se dejó deslumbrar por el poder ni por la gloria!
No creo que sea mi talento. Creo que es el talento de otros lo que me pone humilde, lo que me hace apreciar lo bonitas que pueden ser las cosas; ¡y es que hay tantas cosas!
Alguien que me recoja como a un perro humilde, que me abra la puerta, me regañe, me alimente, me quiera severamente como a un perro, eso es lo que quiero, como a un perro, como a un hijo.
