Si-me-vas-a-amar-que
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El amor depara dos máximas adversidades de opuesto signo: amar a quien no nos ama y ser amados por quien no podemos amar.
Amar a distancia es una gran prueba de amor.
Perdonar es el valor de los valientes. Solamente aquel que es bastante fuerte para perdonar una ofensa, sabe amar.
Amar duele. Es como entregarse a ser desollado y saber que en cualquier momento la otra persona podría irse llevándose tu piel.
Ser amado es muy diferente de ser admirado, pues se puede ser admirado de lejos, mientras para amar realmente a alguien, es esencial encontrarse en la misma habitación, y si posible debajo de la mism...
Amar es, en su esencia, el proyecto de hacerse amar.
Si esta es vuestra forma de amar, os ruego que me odiéis.
Amar es lo contrario de utilizar.
El arte de amar se reduce a decir exactamente lo que el grado de embriaguez del momento requiera.
Dejaré que muera en mí el deseo de amar tus ojos dulces, porque nada te podré dar sino la pena de verme eternamente exhausto.
Vivir sin amar no es, propiamente, vivir.
Puede uno amar sin ser feliz; puede uno ser feliz sin amar; pero amar y ser feliz es algo prodigioso.
Amar es compartir la misma estrella que nos une a la distancia.
Soñaba con ser vieja para tener tiempo para muchas cosas. No quería ser joven, porque perdía el tiempo en amar solamente. Ahora pierdo más tiempo que nunca en amar, porque todo lo que hago lo hago...
Ama como que has de aborrecer, y aborrece como que has de amar.
Para gozar íntimamente y para amar se necesita soledad, más para salir airoso se precisa vivir en el mundo.
Amar y no ser amado es tiempo mal empleado.
De amar las glorias pasadas, se sacan fuerzas para adquirir las glorias nuevas.
La buena vida consiste en amar y hacerse amar suficiente.
No ser nada y no amar nada, es lo mismo.
Es muy cierto que gran parte de los hombres que son incapaces de amar tampoco valen mucho para la amistad. Pero también se ve menudo lo contrario.
Amar y saber, todo no puede ser.
Que ni el sida ni el Papa han conseguido evitar que tiernos mozos y mozas se den al goce de amar.
Amar: cambiar de casa el alma.
Debemos amar a nuestro país aunque nos trate injustamente.
Aprendemos a amar no cuando encontramos a la persona perfecta, sino cuando llegamos a ver de manera perfecta a una persona imperfecta.
Creedlo, para hacernos amar no debemos preguntar nunca a quien nos ama: ¿Eres feliz?, sino decirle siempre: ¡Qué feliz soy!.
Se ha dicho que no podemos amar realmente a la persona de quien nunca nos reimos.
Enamorarse no es amar. Puede uno enamorarse y odiar.
Amar está dentro de nuestro alcance; pero no dejar de amar.
En amor la experiencia no cuenta para nada; porque si contase no se volvería a amar.
La medida del amor es amar sin medida.
No ser amados es una simple desventura; la verdadera desgracia es no amar.
Si realmente queremos amar, tenemos que aprender a perdonar.
No basta amar a los niños, es preciso que ellos se den cuenta que son amados.
La dicha de la vida consiste en tener siempre algo que hacer, alguien a quien amar y alguna cosa que esperar.
Durante la juventud creemos amar; pero solo cuando hemos envejecido en compañía de otro, conocemos la fuerza del amor.
Desesperadamente amar, amarte y volver a nacer para quererte.
Para la mayoría de la gente, el problema del amor consiste fundamentalmente en ser amado, y no en amar, no en la propia capacidad de amar.
El más poderoso hechizo para ser amado es amar.
