Frases para familiares muertos
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Si es posible, se debe hacer reír hasta a los muertos.
¿Quién no sabe que en México seguimos al pie de la letra el precepto bíblico de alabar a los muertos? A los vivos los elogiamos cuando pueden darnos algo.
Yo necesito compañeros, pero compañeros vivos; no muertos y cadáveres que tenga que llevar a cuestas por donde vaya.
La vida de los muertos perdura en la memoria de los vivos.
A dónde podrá ir el que hasta aquí llegó, si más allá solo fueron los muertos.
La guerra terminaría si los muertos pudiesen regresar.
Los muertos son los únicos que ven el final de la guerra.
Me decían que eran necesarios unos muertos para llegar a un mundo donde no se mataría.
los muertos no tienen sueños. son aquellas personas que nunca los cumplen.
Temer al amor es temer a la vida, y los que temen a la vida ya están medio muertos.
La vanidad es tan fantástica, que hasta nos induce a preocuparnos de lo que pensarán de nosotros una vez muertos y enterrados.
Nada es más fácil que censurar a los muertos.
La muerte es una amarga pirueta de la que no guardan recuerdo los muertos, sino los vivos.
Al palpar la cercanía de la muerte, vuelves los ojos a tu interior y no encuentras más que banalidad, porque los vivos, comparados con los muertos, resultamos insoportablemente banales.
Fui bohemio, pero pronto me surgieron las inclinaciones familiares. Es una forma de amar que me gusta.
Hay dos clases de peatones: los rápidos y los muertos.
A los muertos no les importa cómo son sus funerales. Las exequias suntuosas sirven para satisfacer la vanidad de los vivos.
La renuncia de la voluntad propia vale más que resucitar a los muertos
Nada muere; los hombres fingen estar muertos y tienen que aguantar la parodia de sus funerales y afligidas necrológicas, y ahí están, de pie, mirando por la ventana, sanos y salvos, con un nuevo y ...
No es correcto jactarse de los muertos.
Una sublevación de cuarteles ha lanzado del poder a un partido y ha instalado a otro. Esta operación ha necesitado ciento cincuenta heridos y sesenta muertos.
Los muertos no pueden clamar por justicia. Es un deber de los vivos hacerlo por ellos.
Solo los muertos han visto el final de la guerra.
Los muertos no tienen lágrimas y olvidan toda pesadumbre.
Ni los muertos pueden descansar en paz en un país oprimido.
Solo a los muertos se les permite disfrutar del lujo de la libertad, y eso solo porque no quieren nada, y por tanto no pueden ser contrariados.
Los cuerpos muertos han de desecharse con mayor motivo que el estiércol.
A los vivos se les debe respeto; a los muertos nada más que verdad
Hoy está con nosotros en su calidad de demoledor de teorías. Y si no muerde su sentido de la realidad, aunque solo sea con un mordisco pequeño, con este la fe de nuestros padres, entonces compruebe...
Los ojos de los muertos se cierran cuidadosamente, con no menos cautela deberíamos abrir los ojos de los vivos.
La perfecta igualdad no existe, sino entre los muertos
España es un país necrófilo. No se reconoce el mérito ajeno y solamente se ensalza a los muertos.
¿Negros? Negros quiere decir muertos. Yo soy un rasta. Tú no puedes liberar a la muerte. Yo soy vida.
Los muertos son dóciles, pero muy estirados.
¿Qué nos aconseja para rezar más en medio de nuestras obligaciones profesionales, familiares y sociales?
Preferiría ser esclavo del más pobre campesino que reinar sobre los muertos.
Lo más triste cuando no se ha llegado al primer acto de una obra teatral es que cuando vamos a sentarnos notamos que nos han dado por muertos y han ocupado nuestro asiento.
Lo cierto es que la alabanza a los escritores antiguos no procede de un respeto a los muertos, sino de la competencia y la envidia mutua que tiene lugar entre los vivos.
Veo a Alvin con un hijo. Eso es lo que más quiere. ?Lo veo con una mujer ?dijo Rien?. Eso es lo que más echa de menos. ?Lo veo arrodillado junto a la tumba de un niño ?dijo María de los Muertos?. ...
La muerte es alguien que se retira de sí mismo y vuelve a nosotros. No hay más muertos que los llevados por los vivos.
